viernes, 25 de mayo de 2012

¡Siempre de frente!



Se aproxima el día de nuestra salida, los nervios rachean el paso a sones de Callejuela de la O y el pulso se acelera sobre la nube de incienso que perfuma las andas de nuestra Virgen.

Mujer y costalera, tarea para nada fácil, y no precisamente por los kilos que tenemos que llevar, sino por la responsabilidad que dejamos atrás cuando nos ponemos zapatillas, faja y costal.
Quisiera poner en valor el esfuerzo extra que tienen que hacer las mujeres, con cargas familiares y/o responsabilidades domésticas, cuando toman la bendita decisión de llevar sobre sus costales a la Virgen de Fátima.
Hay que dejar muchas tareas hechas antes de comenzar los ensayos. Mi aplauso más sincero va para todas mis compañeras que lo dejan todo organizado y preparado y no faltan a la cita, escribís en mayúsculas la frase que todo el mundo conoce: "CUANDO SE QUIERE, SE PUEDE"

Comienza la cuenta atrás, mañana si Dios quiere, con el izquierdo por delante, procesionaremos, por sexto año consecutivo, a Nuestra Madre Bendita. Teniendo en cuenta que será la segunda salida que hagamos este año, sí la segunda, no me he equivocado, el pasado martes 22 hicimos un traslado con tanta importancia como la procesión de mañana. No podemos olvidarnos de la caridad y en estos tiempos toca poner sobre la mesa el verbo COMPARTIR. Montellano demostró, una vez más, que la solidaridad es una de sus vecinas más preciadas.
Queremos agradecer a todas las personas, hermandades y asociaciones que aportaron ese kilo de ayuda tan necesario, a la Agrupación Musical Santa Cecilia de Sevilla por allanarnos el camino, a Cándido por su reportaje de cariño y a nuestro Párroco Fray Florencio por su trabajo incansable.

Gracias de todo corazón por los más de 1.000 kilos de alimentos que recogimos para Cáritas.

Costalera!!! ilusión de mujer cofrade, el golpe seco del llamador de plata sonará para nosotras. Es el momento, llega nuestra hora, vamos al cielo con fuerza que hermanos y hermanas nuestras nos aplauden desde el palco celeste de la gloria eterna.
Conjuguemos la ilusión, las ganas y las fuerzas y no habrá tornado que pare a la cuadrilla de Costaleras de Nuestra Virgen de Fátima.

¡A esta es!